Vanlommel selecciona y compra terneros recién nacidos. Esta labor está a cargo de un equipo de profesionales especializados, expertos que saben estimar qué cualidades son necesarias para dar respuesta a las diversas necesidades de nuestros clientes. Además, Vanlommel también comercializa terneros recién nacidos.
Vanlommel tiene en cuenta los deseos de sus clientes incluso desde la compra de terneros recién nacidos. Y es que los terneros se seleccionan en función del tipo de carne de ternera deseada. Vanlommel también controla toda la cadena de suministro que afecta a los terneros recién nacidos: venta, transporte, recogida y control. La trazabilidad de cada animal es, por tanto, absoluta.
Alimentación, supervisión y transporte: Vanlommel sigue de cerca a los terneros. El proceso de seguimiento comienza mucho antes del procesamiento de la carne de ternera blanca.
Nuestros terneros se crían en varias granjas de Bélgica y los Países Bajos. Por razones de bienestar animal, limitamos la distancia entre los establos y el matadero. De este modo, optimizamos el bienestar de los animales durante el transporte al matadero.
Vanlommel lleva un seguimiento del ciclo de vida de cada animal a partir de la fecha de compra, utilizando la herramienta Vanlommel Information System. Este sistema controla el origen, la alimentación y la medicación de cada animal.
Vanlommel vigila de cerca el crecimiento de cada ternero; durante el periodo de cría, el ganadero recibe cada semana la visita de un supervisor de Vanlommel, que aporta asesoramiento sobre la alimentación y la salud de los animales. De este modo se verifica que los animales tienen una alimentación adecuada y que su estado de salud es óptimo. Asimismo, las instalaciones reciben la visita periódica de veterinarios que verifican el estado de los animales.
Vanlommel utiliza medios propios para transportar los terneros: primero desde el centro de recepción hasta la granja y, después, desde la granja al matadero.